«…Pero apenas había garabateado unas páginas del primer capítulo cuando Julie me reveló sus verdaderos objetivos: llevar a la humanidad a generar, ya no una ‘Noosfera’ limitada a la mente humana, como pretendía Teilhard de Chardin y como el profesor Roger Nelson ha mencionado a menudo en sus discursos, sino a generar mucho más allá, una especie de ‘Olasfera®’, que integre la mente de todo y del Todo… Donde los seres están todos, sin excepción, conectados entre sí, aquí en esta Tierra, y más allá del Espacio-Tiempo, más allá de todas las diferencias, más allá también de toda dualidad, como explica Julie en el texto que acabo de hacerte leer. Es cierto que se trata de un proyecto inmenso, pero como ha señalado el profesor Nelson en su libro sobre las Conexiones y en sus conferencias, es el único futuro posible para la humanidad. Así que tuve que replantearme mi plan y dejarme guiar por Julie. Así fue como, poco a poco, tuve que respaldar mi borrador inicial con investigaciones cada vez más detalladas. También fue entonces cuando me di cuenta de lo mucho que cada Simposio, cada encuentro con nuestros ponentes, cada lectura y orientación de Julie, cada experiencia de conexiones, me habían preparado de hecho para elaborar este dossier y el proyecto de libro resultante.

– Increíble», exclamó Chris.

– Es increíble, ¿verdad? añade Martha, orgullosa de su pequeño protegido.

Chris no puede ocultar su curiosidad… ¡Le encantaría echar un vistazo a estos famosos documentos ahora mismo!

«¿Es este el famoso «Internet cósmico» del que habla Julie?

– Sólo una parte», dice Béatrice. Digamos que se parece mucho a una «Internet terrestre», que no sería más que una ínfima parte de la «Internet cósmica» mencionada por Julie. Chris prosigue sus explicaciones de forma muy didáctica:

– Estos NEG aportan pruebas irrefutables de la existencia de una «conciencia global», como la llama tan acertadamente el profesor Nelson en su libro, porque registran movimientos correlativos cuando convergen pensamientos y sentimientos en torno a un mismo tema, lo que corrobora las teorías de Carl Jung sobre la existencia de sincronicidades atribuidas al inconsciente colectivo. Béatrice, que se ha interesado mucho por las investigaciones de Carl Jung, pidió una aclaración:

– Pero en los resultados de esta investigación, me parece que hay algunos matices en relación con la teoría de Jung, ¿no crees?

– En efecto, según el profesor: «Lo que tenemos aquí es una interacción invisible e imperceptible que implica una sutil interdependencia con esa ‘unidad’ de la que hablan ‘poetas y sabios'».

– ¿Así que existe realmente una especie de «mente global», como una «conciencia compartida» que puede «organizarse a sí misma»?

– Sí: las estadísticas obtenidas a partir de estos electroencefalogramas establecieron una probabilidad de casi diez a la potencia de trece, ¡lo cual es más que significativo! La prueba está en los resultados obtenidos a partir de estudios sobre grupos de oración, grupos de meditación ¡e incluso ciertos conciertos! Los cambios en los datos aleatorios se han correlacionado con acontecimientos importantes que vinculan a la humanidad a escala mundial».

¿»Tal vez sea necesario introducir una nueva hipótesis según la cual el «inconsciente colectivo», cuya existencia y pertinencia han sido demostradas, se encuentra quizás bajo la influencia de una «conciencia colectiva de los espíritus»? Pues como preveía Kardec: «La influencia del mundo invisible sobre el mundo visible es como la de los planetas: ¡una fuerza»! Ya que conoce a Teilhard de Chardin, ¿sabe lo que escribió sobre este tema?

– No, no lo sé. Chris estaba aún más desconcertado porque su profesor prácticamente le había obligado a leer todos los libros de T. de Chardin. Por más que rebuscó en su memoria, no pudo ver a qué se refería Beatrice.

– Puede que no se haya dado cuenta, pero en su libro Le Milieu Divin escribe: «Debemos recordar, y no hemos terminado de insistir en este punto, que lo Sobrenatural espera y apoya el progreso de nuestra naturaleza». ¿No es esto un eco de la «influencia del mundo invisible» que Kardec subraya como influyente en nuestras vidas?

Chris asintió. En efecto, había olvidado este pasaje, que es esencial ahora que está enfocando las cosas desde un ángulo completamente diferente, un ángulo mucho más amplio gracias a Julie. Julie, que no deja de recordarnos en cada ocasión que debemos tener una visión mucho más global de nuestras vidas, de nuestro ser, de nuestra Tierra, de nuestra Humanidad, de nuestro Universo, de nuestro Espacio-Tiempo.

– Voy a dar un paso más», añade Béatrice. Cuando consideramos en la investigación cuántica que es el «observador» quien, a través de su observación consciente, genera la aparición de una partícula antes invisible… ¿por qué no partir de una hipótesis completamente nueva? ¿Y si fuera, de hecho, la partícula invisible la que provocara que la conciencia del observador la hiciera aparecer? Esta hipótesis tiene mucho sentido si nos remitimos a la teoría de Kardec sobre la influencia de lo invisible en lo visible. Hace que las observaciones sean de repente más lógicas, ¿no?

– No va a ser fácil conseguir que la gente escuche y demuestre algo así! concluye Martha con pragmatismo.